Matarromera inaugura Casal de Vide, su bodega de Castrelo de Miño


El empresario Carlos Moro, señor del grupo bodeguero Matarromera, asienta uno de sus tentáculos en O Ribeiro con la inauguración de bodega propia en Castrelo de Miño. Se trata de Casar de Vide, aunque ya venía elaborado un ribeiro desde 2017 bajo la marca CM Viña Tenencia. La llegada a tierras de la vieja Gallaecia de este grupo bodeguero de presstigio recibió las bendiciones de la Xunta de Galicia, pues el presidente del ejecutivo gallego, Alfonso Rueda, oficó el acto.

La bodega, situada a escasos metros del río Miño, ha sido renovada por completo, implementando nueva maquinaria como un conjunto de intercambiador de frío, sistemas de digitalización y maquinaria de alta tecnología para sus procesos de elaboración y en el ámbito de la producción, la transformación y la comercialización.

De igual manera, se ha mejorado la eficiencia energética de la bodega y han instalado sistemas de producción y almacenamiento de energía fotovoltaica, ya que la sostenibilidad es uno de los pilares de la compañía. Reducir su consumo energético, contribuir a la reducción de las emisiones acorde a los criterios de la ONU y ser más respetuosos con el medio ambiente es uno de sus principales objetivos.

Desde su adquisición en 2019, Bodega Casar de Vide ha ganado presencia en el mercado gracias a sus cualitativas elaboraciones siguiendo métodos de elaboración de alta tecnología unidas a la forma tradicional de esta denominación de reconocimiento internacional.

En palabras del empresario y bodeguero, “tras años de reacondicionamiento y mejoras para dotarlo de la más avanzada tecnología enológica, podemos por fin abriros la puerta de nuestra Casar de Vide, la casa de la vid, nuestra casa y también la vuestra", concluyó Carlos Moro.

Este grup emresarial vinícola tiene bodegas en Ribera del Duero (tres), Cigales, Rueda, Toro, Rioja y Ribeiro.

Otra bodega de prestigio en Ribera del Duero, en este caso Pago de Carraovejas -es propiedad de los dueños sel sgoviano restaurante José María- también puso su pica colonizadora en O Rineiro con la adquisición de Emilio Rojo (una de las grandes marcas de referencia entre los vinos gallegos- y Viña Mein.