Capaz de plarle cara a un inconsciente y populista como Donald Trump siendo presidente de EE.UU, ahora el chef asturiano llega hasta Ucrania. El chef afincado en Estados Unidos se ha desplazado junto con su ONG World Central Kitchen hasta Polonia para dar comida caliente a las miles de familias que huyen de la guerra contra Rusia.
"Haremos todo lo posible para no decepcionarlo", asegura el cocinero, quien junto con su asociación benéfica sirvió mientras nevaba en el pueblo polaco de Medyk un total de 4.000 platos calientes en tan solo 18 horas.
Una ayuda alimentaria que, según informa La Voz de Asturias, también se extiende a los refugiados ucranianos en Rumanía, así como a los que no han podido salir o quienes defienden el país.
Además el asturiano espera poder repartir también comida en el resto de países fronterizos, puesto que el principal objetivo es cubrir cuanto antes las necesidades básicas de la población.