Los arenales marisqueros del fondo de la ría de Pontevedra registran valores económicos históricos, según se deduce del balance oficial. Los bivalvos alcanzaron cifras de récord en las subastas de la lonja de Campelo, con la almeja fina cotizada a precios de récord: hubo subastas en las que se elevó a 85,50 euros el kilo, precio sin precedentes desde que se registran estadísticas, hace precisamente 20 años.
También el berberecho se cotizó por encima de sus valores habituales en las playas cercanas a la desembocadura del río Lérez. El sector extractivo, satisfecho por los buenos resultados históricos pero sin disponer de una razón firme, apunta el éxito de la relación demanda/precio a la minoración de las importaciones, especialmente los controles sobre la almeja que se introduce en el mercado gallego desde Portugal.