Lara Da Silva, la única presidenta en la actualidad de un Consejo Regulador del vino gallego


Seguimos en clave 8M con Lara Da Silva, la única presidenta en la actualidad de un Consejo Regulador del vino gallego, otra referente por su cargo, trayectoria y en este caso también por su juventud. Nació en Verín, es Licenciada en Derecho y Diplomada en Criminología, y una apasionada de sus sector, que ha mamado desde pequeñita en los viñedos de su familia. Tiene muy presente que "nuestra tierra gallega, sobrevivió gracias a la mujer". 

Francamente, en mi caso concreto no recuerdo haber vivido en primera persona ninguna ‘salida de tono’ en mi etapa estudiantil, ya que he tenido siempre la suerte de contar tanto con profesores y compañeros, cuyas relaciones no dependían ni se condicionaban, por el sexo de la otra persona. Sin embargo, curiosamente ha sido ya en la etapa laboral, tanto desempeñando mi profesión principal como abogada, como también en mis labores como Presidenta de la Denominación de Origen Monterrei, donde he tenido que luchar contra ciertas situaciones incómodas. 

Hoy en día, todo el mundo dice o hace algo, y acaba por soltarte aquello de “bueno no lo digo porque seas mujer, pero” …o “con tu edad” … ¡es insufrible!, ya le digo yo, que nada bueno viene después de ese “pero”. Así que sí, a veces he tenido que dar explicaciones que, a otros compañeros por ser hombres, no le han sido pedidas. 

Incluso a nivel institucional he sabido, por ejemplo que me han colocado estratégicamente en una foto, por ser mujer y joven…o me han llamado a una reunión para presuntamente pedirme opinión sobre algo, cuando el hombre que me lo pide me ha tratado siempre con la mayor condescendencia…Y es curioso, como todo se entremezcla, como pasas de ser utilizada en búsqueda de una ventaja pública, a no ser tenida en cuenta en la esfera privada. 

Tengo la sensación, a veces, de hipocresía y falta de coherencia

Si soy sincera, tengo con esta fecha un sentimiento encontrado. Entiendo perfectamente su significado, el sentimiento que debe permanecer vivo, el reconocimiento que supone de todo el trabajo que se ha hecho hasta llegar a como son las cosas hoy. Pero también tengo como persona y mujer que forma parte de una sociedad, la sensación a veces de hipocresía y falta de coherencia, como lo que explicaba hace un rato.  

Y en este sentido, tengo que decirlo: fijar un día en el calendario, no me identifica. Si lo hace el trabajo diario, si lo hace sentir que cada día lucho con pequeños gestos para que la próxima que venga, se sienta segura, capaz y respetada. ¡Ojo! como jurista tengo un profundo respeto por el derecho a la huelga o por el derecho a poder manifestarse, pero eso también implica respeto por quien no se identifica con estas medidas y sí con otras. 

Siempre he opinado que las reivindicaciones deben hacerse todos los días del año, y efectivamente, en mi caso así lo hago. Digamos que soy bastante guerrera, y no suelo callarme (risas). Aunque también es verdad, que la vida te va enseñando a saber que guerras merecen la pena y cuáles no. 


Dar visibilidad al papel de la mujer y reivindicar una forma de hacer o elaborar

A nivel institucional casi siempre nos llega información de las diferentes campañas de igualdad que se están desarrollando desde las distintas entidades o asociaciones. De hecho, en nuestro Consello Regulador solemos sumarnos a las mismas con el objeto de dar visibilidad a esas campañas y dar visibilidad al papel de la mujer. 

En el sector agrario no hace falta que recuerde la importancia del papel de la mujer, porque creo todos lo conocemos, y estamos orgullosos de ellas. Nuestra tierra gallega, sobrevivió gracias a la mujer. No podemos olvidar nuestro pasado… pasamos como sociedad por años difíciles donde nuestros abuelos, tuvieron que emigrar mientras que las mujeres, con gran trabajo y esfuerzo mantuvieron muchas casas abiertas en el rural gallego, en realidad, mantuvieron el rural gallego vivo. 

Y es cierto que, en los últimos años, cada vez son más las mujeres que apuestan por el rural, creando empresas con valores o productos de antaño, reivindicando una forma de hacer o elaborar. ¡Es impresionante! 

"Tus metas no están condicionadas por tu sexo"

El trabajo debe ser conjunto como sociedad, y si no sólo en este sector, en el sector vitivinícola, sino en todos. Lo fundamental es que eduquemos a los pequeños en la igualdad. La educación la clave, trabajar en ella, educar en la libertad, en la responsabilidad, en la autosuficiencia, en el respeto hacia los demás... No podemos confundir a los nuestros pequeños, no podemos malgastar esfuerzos y dinero público cuando la solución es un proyecto integral de base y con la necesaria implicación de todos los estamentos. 

En el caso de Monterrei, como anécdota, debemos indicar que tanto la Presidencia, como la Vicepresidencia o la Secretaría del Consello Regulador está encabezada por mujeres. Y vemos día a día como se incrementa el número de viticultoras que se inscribe en nuestro Registro de Viñas, y como no, que están al frente de bodegas. 

En nuestro sector la mujer en realidad siempre ha sido parte fundamental del trabajo. En la realidad no ha estado en la sombra, ¿pero ha sido la titular de la explotación sobre el papel? ¿ha sido la viticultora inscrita?, tristemente no siempre… así que ahora cuando ellas, son las que toman las riendas de todo, me siento muy orgullosa, siento que los pequeños cambios de verdad generan al final grandes cambios. 

Y no solo lo vemos en la base, es decir, en viticultoras y bodegueras sino que cada día nos encontramos más compañeras enólogas, responsables de bodegas, de ventas y exportaciones, de contabilidad…y eso es porque alguien hace mucho tiempo creyó y exteriorizó en la posibilidad de que una mujer estaba a la altura de ser quien quisiera ser. 

Eso es lo que le debemos enseñar a nuestras niñas, y si me permite, también a nuestros niños. “Tus metas no están condicionadas por  tu sexo, sólo depende de tu trabajo y esfuerzo” y la sociedad, todos,  debemos saber responder con objetividad.