Las cooperativas reclaman proyectos que impulsen el sector agroalimentario en el rural

La Unión de Cooperativas AGACA ha aprovechado su reunión con la Ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, en el marco del Foro de la Economía Social Galega (ForoESGal), para reclamarle que se impulsen proyectos innovadores que favorezcan el desarrollo del cooperativismo agroalimentario, poniendo sobre la mesa la importancia de promover las líneas específicas de apoyo a la economía social.

En este sentido, AGACA ha aprovechado el encuentro para poner en valor que las cooperativas cumplen una función capital como modelo de empresa en la economía social. Son generadoras de riqueza y puestos de trabajo y, además, prestan servicios en el ámbito rural, donde a menudo hay falta de iniciativa privada.

AGACA ha comentado a la ministra Yolanda Díaz la necesidad de apoyar especialmente proyectos singulares en el medio rural, que permitan trabajar en ámbitos tan estratégicos como el relevo generacional y la llegada de los productos cooperativos al consumidor.

Desde las cooperativas agroalimentarias han señalado las principales necesidades de un sector que tiene el crecimiento en la transformación de los productos y la especialización empresarial sectorial como objetivos más inminentes. En este sentido, le han propuesto a la ministra buscar un encaje de las herramientas de las políticas de empleo con las necesidades del cooperativismo agroalimentario para así poder garantizar su concreción en proyectos eficaces para la creación de empleo, la colaboración empresarial, la innovación y la internacionalización del sector.

Finalmente, se han planteado cuestiones de orden más interno pero no por ello menos relevantes, como la adecuación del sistema de apoyo a la formación continua para que profesionales de la agricultura y la gandería tengan mayor acceso a la misma, así como a las cooperativas agroalimentarias y a las pymes del medio rural.

En relación con la Crisis COVID-19, AGACA encuentra imprescindible considerar a la cadena alimentaria de forma inequívoca como sector estratégico y a todas las personas que trabajan en él como esenciales en este periodo de crisis. Esto habilitaría y permitiría el desarrollo de ciertas medidas específicas para que continúe el trabajo de favorecer el suministro de alimentos a la sociedad.