Desde este domingo la Xunta de Galicia ha aumentado el uso obligatorio de la mascarilla, que pasa a ser mandatorio en todo momento tanto en la vía pública como en espacios en aire libre o cerrados de uso público, aunque se pueda garantizar la distancia de seguridad de 1,5 metros.
La nueva norma afecta a los establecimientos de hostelería, en bares y restaurantes los clientes también estarán obligados a llevar puesta la mascarilla y sólo podrán quitársela en el momento específico de la consumición, teniendo que colocarse de nuevo inmediatamente después.
La nueva norma también obliga a llevar puesta la mascarilla cuando paseemos por la playa, aunque pueda retirarse en el momento del baño o cuando estemos en la toalla. También recuerda la obligatoriedad en todo tipo de transportes públicos y privados, espectáculos, centros de formación, actividades grupales en hoteles y alojamientos turísticos.... En el caso de reuniones de personas no convivientes, se recomienda el uso de las mascarillas aunque se pueda garantizar la distancia de seguridad.
Paralelamente, la nueva norma también prohibe el botellón en toda Galicia, censurando específicamente el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública, por los riesgos que presennta para la salud pública, relacionados con la "aglomeración incontrolada de personas y con ausencia o relajación de las medidas de seguridad y distanciamiento social".