La crisis del Covid 19 no está afectando a todos por igual y hasta dentro de un mismo subsector tiene desigual incidencia. Es el caso del sector transformador lácteo, de las queserías en concreto. Así lo hemos constatado con el presidente de la DOP Queixo Tetilla, Javier Sampayo, que a la vez dirige la quesería lalinense Pazo de Anzuxao.
“A las queserías está afectando de manera desigual, depende del perfil del cliente o el canal con que trabajamos cada cual. En nuestro caso, me refiero a Pazo de Anzuxao, estamos trabajando prácticamente igual que antes de la crisis, un poquito menos quizás, por la caída de ventas en el canal horeca, aunque la equilibramos con el aumento en alimentación”.
Según expone Sampayo “Bama, por ejemplo, registró en marzo un 30% de aumento en las ventas, pero otros lo están pasado mal, sobre todos aquellos que vendían mayoritariamente en ferias, que ahora apenas tienen salida de producto; otros tenían mucho stok y han aprovechado para enviar al personal de vacaciones o han solicitado un ERTE”.
Interpelado por las ventas online, Javier Sampayo subraya que “nosotros vendemos algo, pero muy poco. El queso es un producto que tiene difícil salida por este canal ya que hay que enviarlos en frío y eso encarece mucho los portes, salvo que sea una cantidad considerable. Enviar un solo queso en óptimas condiciones puede suponer entre 15 o 16 euros y eso resulta inasumible para el consumidor final por el encarecimiento del producto”.
Sobre lo precio de la leche subraya que “por el momento se mantiene estable afortunadamente, pero está entrando leche de Francia y eso podría tener repercusión negativa y bajar los precios, algo que, a mi juicio, habría que evitar”.