En HOSTELERÍA DE ESPAÑA somos
conscientes de la delicada situación por la que está atravesando el país, con
el consiguiente efecto negativo que la pandemia del coronavirus está teniendo
en el tejido empresarial. En línea con nuestro compromiso con la sociedad y como sector fundamental en nuestra cultura
y forma de relacionarnos, punto de encuentro y socialización, factores que
sin duda recuperaremos con el esfuerzo de todos, apelamos a la sensibilidad y responsabilidad del Gobierno para paliar
al máximo los efectos tan devastadores que esta crisis está ocasionando.
Por
ello, desde HOSTELERÍA DE ESPAÑA consideramos insuficiente el paquete de
medidas económicas anunciadas por el presidente del Gobierno para paliar los
efectos del coronavirus. Reconocemos el esfuerzo del Gobierno de España para
frenar los efectos económicos de esta pandemia al movilizar hasta 200.000
millones de euros. Además, creemos que medidas como la flexibilización de los ERTES y las destinadas a garantizar la liquidez de las empresas
ayudarán, sin duda, al conjunto del tejido empresarial. Sin embargo, se hace
necesario adoptar más medidas para evitar la quiebra de los más de 300.000
negocios hosteleros que tenemos en nuestro país.
El 95% de los negocios hosteleros
tienen menos de diez empleados en plantilla y de ellos el 45% no cuenta con
trabajadores, por lo que un elevado porcentaje de estos negocios depende exclusivamente
de los autónomos. Teniendo en cuenta el perjuicio que está ocasionando la
crisis del coronavirus a los autónomos de nuestro sector, consideramos
necesaria la suspensión de la
cotización de los autónomos de hostelería.
Además,
reivindicamos la suspensión de cualquier
obligación de pago de los establecimientos hosteleros a las administraciones,
como son el pago del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) y resto de impuestos
municipales como pueden ser los impuestos
de las terrazas. Por ello, extendemos nuestras reivindicaciones a otros
ámbitos administrativos, como los Ayuntamientos y las comunidades autónomas,
quienes tienen competencia directa en este tipo de impuestos.
También
se hace necesaria la supresión de todas
las tasas e impuestos en todos los suministros de energía. Por otro lado,
para evitar la desaparición de los negocios, es necesaria la renegociación de pólizas y una financiación
bancaria con mayor flexibilidad.
Asimismo,
solicitamos la suspensión de las
obligaciones económicas de los establecimientos hosteleros con los arrendadores
de sus negocios, puesto que éstos no están en su normal funcionamiento, tal
y como ya ha anunciado el presidente francés que hará en su país.
En
HOSTELERÍA DE ESPAÑA apelamos una vez
más a la sensibilidad del gobierno español y pedimos que tenga en cuenta la
situación a la que se enfrentan los negocios hosteleros españoles, los cuales
dan empleo a más de 1,2 millones de trabajadores en el conjunto del sector de
la restauración.