Terras Gauda promueve la pasión por el vino con sus experiencias de enoturismo

El Grupo Terras Gauda pone en valor su rico patrimonio vitivinícola a través de las experiencias que proponen los planes de enoturismo de Bodegas Terras Gauda, Bodegas Pittacum y Quinta Sardonia. Tres vértices de una estrategia común que busca difundir la pasión por el vino y abrir una puerta a una filosofía que aúna el conocimiento heredado durante décadas con los últimos avances tecnológicos. 

Personalidad única e intransferible, singularidad, fidelidad al terruño, variedades autóctonas. Coordenadas claras e irrenunciables que se transmiten a los visitantes, en constante aumento, que traspasan las puertas de las bodegas del Grupo para conocer sus entresijos. Para descubrir, de primera mano, del viñedo a la sala de catas, qué secretos encierran unos vinos que han situado a Terras Gauda entre la vanguardia vitivinícola nacional. 

La participación en Spain through its wineries, respaldado por un selecto grupo de compañías como Freixenet o Matarromera, da buena cuenta de esta posición de privilegio. Bajo el auspicio del Foro de Marcas Renombradas, este novedoso planteamiento, dirigido a un perfil de turista internacional, apuesta por un enfoque exclusivo, de calidad, diferencial y pionero. Las bodegas, enclavadas en las principales Denominaciones de Origen, actúan como focos de un proyecto que eleva el enoturismo a nuevas cotas, como catalizador para promocionar a España en el extranjero. 

Planes variados y flexibles 
Terras Gauda, ofrece múltiples propuestas caracterizadas por su flexibilidad y capacidad de adaptación a los distintos perfiles. Para abrir boca existe, durante todo el año, la posibilidad de acercarse a la bodega para una toma de contacto en la que conocer los procesos de elaboración y disfrutar de una degustación de sus vinos. Un plan que, en los meses de verano, se amplía con un recorrido en microbús por los viñedos. 

Para grupos de al menos diez personas se brinda la opción de personalizar la propuesta y darle un toque diferencial. Se recorren a pie las viñas, observando in situ el centro neurálgico de Bodegas Terras Gauda, y los participantes reciben un obsequio que añadir a los gratos recuerdos de la jornada. 

La oferta de enoturismo de Terras Gauda se amplía con el plan familiar, concebido para que mayores y pequeños disfruten por igual de una experiencia diferente, en el que los niños dan rienda suelta a su creatividad en talleres especialmente concebidos para ellos; el romántico, diseñado para que las parejas de enamorados gocen de un día inolvidable; y entre amigos, una modalidad de gran éxito en la que también pueden participar empresas para estrechar lazos entre compañeros, garantizando siempre los buenos momentos. 

La riqueza del entorno 

Situada en Arganza, en el corazón montañoso de El Bierzo, acudir a Bodegas Pittacum significa descubrir viñedos de hasta ocho siglos de antigüedad, que transmiten una profunda herencia vitivinícola que se remonta a la época del Imperio Romano. Una tradición que deja poso en unos vinos que hablan de un terruño que se trabaja palmo a palmo, con un conocimiento meticuloso acumulado durante décadas. La Casona, con una arquitectura característica que la convierte en un atractivo añadido, alberga la sala de catas donde se saborean sus vinos singulares. 

Siguiendo ruta hacia el este, en Sardón de Duero, Quinta Sardonia se erige desde hace más de dos décadas en referencia de la viticultura biodinámica. Una filosofía que no sigue el camino más sencillo, sino el más idóneo para elaborar vinos únicos e irrepetibles. El visitante descubre el significado de la más extrema de las prácticas de la agricultura ecológica y cómo se traslada a la copa. 

Propuestas de enoturismo que, en el caso de las tres bodegas, tienden igualmente puentes con su entorno, con sinergias que abarcan desde la rica gastronomía a los alojamientos con encanto, sin olvidar el patrimonio cultural y artístico de rincones que merece la pena descubrir y explorar.