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| Carolina y Miguel |
Ripandi Distribuciones, firma que regenta desde Goián, Óscar Martínez, presentó por todo lo alto en el Padador de Baiona los vinos de Valduero, bodega que incorporó recientemente a su portafolio de proveedores. Para finalizar la velada, los vinos se degustaron con jamón y embutidos de la firma segoviana Monte Nevado y con Bonito del Norte, agujas, boquerones en vinagre y anchoas de Emilia, anchoas en salazón con el espetáculo añadido la soba y fileteado en directo, luego aliñadas con aceite.
Carolina y Miguel fueron los encargados de presentar los vinos de Valduero, una de las bodegas pioneras en Ribera del Duero, poseedora de 30 hectáreas de viñedo -la segunda que más terreno posee en propiedad- en la zona más alta de esta comarca vinícola y decantada por la viticultura tradicional, sin riego y sin utilización de fertilizantes.
El primer vino que desfiló por la pasarela fue el Valduero Crianza 2012, de buena potencia aromática, frutoso y franco; un crianza con 14 meses en barrica y dos años en botella. Le siguió el Valduero Una Cepa 2011, que así se llama porque el vino de cada botella procede de una única y exclusiva cepa. Más goloso que el crianza, con más cuerpo y más redondo.
A continuación llegó turno para el Valduero Reserva, segundo en la reciente Cata Transfronteiriza HG&T en la clasificación de Ribera de Duero Reservas; muy vivo, mantiene frutosidad con maderas muy bien ensambladas. Glicérico y amante.
La gran sorpresa fue el Valduero 6 Años, de elegantísima nariz, nobleza tánica, muy redondo...un cañón. Cerró la pasarela el Valduero Gran Reserva 2005, de impresionante color, sin nada de atejados, brillante, de ataque goloso y posteriores percepciones de taninos nobles.