
El equipamiento tecnológico fue cosa de la firma J. Carrera, pontevedresa y gerenciada por Javier Carrera, y del interiorismo se encargó Jairo Bello.
En la inauguración se desgustó la pizza, de masa con un toque crujiente, que nada tiene que ver con la industrial; unas croquetas que, aunque de quinta gama, resultan sabrosas y cremosas; aros de cebolla, que son un vicio; unas alitas de pollo broaster, crujientes y jugosas, con un postgusto picantillo que le da rock & roll a la vianda. También elaboraran pollo asado, material que, por cienrto, provée otra firma pontevedresa como es Lago.
Tecnológicamente el local está excelentemente dotado. Una masadora inteligente Smart Dough elabora la masa para las pizzas; las freidoras Broaster, un horno Pizza Master y un asador de convección de la marca Alto Shaan para las piezas enteras de pollo conforman la coquinaria de última generación del nuevo establecimiento.