
A esta cata
se han sumado marcas de todas las tipologías de vino de la Denominación de
Origen Rías Baixas, desde monovarietales hasta vinos en barrica, pasando por
los coupage, los espumosos y
elaborados con variedades de uva específicas de cada subzona. En su mayoría,
pertenecen a la añada 2015.
A nivel
general, ambos expertos consideran que la calificación de esta añada va a ser
superior a la anterior, por las cualidades que han apreciado en los vinos
catados. Tal como ha afirmado Vecilla, esta añada 2015 se presenta “con una acidez muy equilibrada y unos vinos
que en boca resultan más largos y untuosos”. En este sentido, prevé que las
futuras elaboraciones especiales serán de gran calidad y anima a los bodegueros
a “apostar por vinos envejecidos en
botella, aprovechando el potencial de la acidez, de manera que puedan coexistir
varias añadas”.