El restaurante “Culler de Pau” permanecerá cerrado
previsiblemente hasta el mes de marzo de 2015, fecha en que volverá a abrir sus
puertas tras un proceso de mejora en el que se dará un mayor protagonismo al
comensal y al entorno en el que está integrado el establecimiento. El
establecimiento que regenta Javier Olleros tuvo problemas urbanísticos
derivados de una denuncia por presuntas irregulariodades.

El objetivo es aprovechar las obras de mejora del local
cerrando unos meses para darle valor añadido a la marca “Culler de Pau”,
optimizando la experiencia de degustar un plato y para que el comensal pueda
aprehender todo el proceso gastronómico, desde el medio natural, el producto y
el productor que lo suministra hasta el arte de preparar el plato y servirlo
con un buen vino.
En este sentido, el comensal va a tener una importancia
clave en el nuevo “Culler de Pau”, pues se le va a abrir un nuevo abanico de
posibilidades como la realización de actividades como talleres y demostraciones
culinarias, en las que podrá convertirse en parte activa del proceso gastronómico.