Solo la pequeña y fría Islandia y la lejana Nueva Zelanda se sitúan por
encima de Marruecos como países más acogedores para los turistas extranjeros,
según un informe del Foro Económico Mundial (WEF) que ha analizado
distintos comportamientos de 140 países. El Reino de Marruecos ocupa la tercera
posición y ha logrado la mención de “muy buena acogida” a solo una décima de
punto sobre los dos primeros.
Esta iniciativa tiene como objetivo, según el
WEF, evaluar la capacidad de los países para abrirse a la diversidad cultural
de los turistas extranjeros. Un gran reto para el turismo en la era de la
globalización. Marruecos ha sabido combinar los requisitos y las costumbres
occidentales con su idiosincrasia cultural sin negar su alma e identidad.
España
representa el segundo país emisor para Marruecos y la cifra de turistas se
acerca al millón. Sin duda uno de los destinos más buscados es la imperial
Marrakech, pero no es el único.