Quen non veu Lisboa non veu coisa boa

El tranvía 28 frente a la P. do Comercio
Hay 31 razones por las que no debemos perdernos Lisboa, o al menos esta es loa conclusión a la que llegan los periodistas estadounidenses de Global Post que pintan un retrato sugestivo de la capital portuguesa en un artículo recientemente publicado.

Más soleada de Madrid, Roma o Atenas, Lisboa ofrece un aire acondicionado natural, gracias a una brisa que suele soplar desde el Atlántico. Así comienza el relato de los periodistas, que subrayan el hecho de contar con una playa a 20 minutos del centro de la ciudad.

Destacan también el tranvía 28, que pasa por los barrios históricos como Alfama y que nos puede llevar hasta el Mercado da Ladra el río Tajo, que tiene vistas al mar, y el hecho de que confluyan en esta capital europea ritmos africanos y latinoamericanos, de los que poder disfrutar de los numerosos bares y restaurantes de la ciudad.

En el artícolo se resalta la calidad del café, su licor de guindas, la famosa ginjinha; el hecho de que los toros no mueran en la plaza; el contraste entre lo histórico y la ciudad moderna; una comida buena y barata, el fado -ya constatado oficialmente bien cultural e inmaterial de la Humanidad-, los deliciosos pasteles de Belén...


En el artículo se menciona el barrio de El Chiado, renacido de las cenizas, la sabrosa cocina de Goa, la magia de Sintra, la prestación de calidad de los mercados, destacando el de la Ribeira, los espacios verdes de la ciudad,… y finalmente, una referencia a los limpiadores de zapatos que, a pesar de que ya han desparecido casi toda Europa, todavía se puede encontrar en Lisboa. Acreditamos.