Tras cerca de año y medio sin hogar, el luminoso de Tío Pepe
ya cuenta con una nueva ubicación. Gracias al apoyo del Ayuntamiento de Madrid
y a los incansables esfuerzos de González Byass por conseguir que el luminoso
de la Puerta del Sol luzca de nuevo en la plaza que le vio nacer, Puerta del
Sol número 11 albergará este icono madrileño que ha sido testigo de importantes
acontecimientos históricos.
El primer luminoso de González Byass, que fue instalado en
1936, es uno de los elementos más antiguos de la Puerta del Sol. Basta con
tener en cuenta que el Kilómetro Cero data de 1950, el Oso y el Madroño de 1967
y la Estatua Ecuestre de Carlos III de 1994. Posteriormente, este luminoso
cambió su imagen en 1957 por el de “Tío Pepe. Sol de Andalucía embotellado”,
que contaba con la imagen humanizada de la botella de este fino. Desde entonces
este símbolo se convirtió en un hito español que traspasó fronteras y se hizo
mundialmente famoso.