
Parece que fue ayer cuando Carola Navarro se sentó en una mesa con Jaime Rivero y pronunció la frase que les cambiaría la vida: “con tu coco y mis manos coge un local y triunfamos”. Y el del “coco” se puso manos a la obra.
Desde entonces, las estadísticas dicen que más de 250.000 personas han disfrutado, y siguen disfrutando, en estos 15 años, de los sabrosos garbanzos, “piripis” para los castizos, cosechados con familiar cuidado en los huertos de Cabañas de Polendos (Segovia), y cocinados con paciencia, mimo y mucho cariño.