
Por un lado, el Hotel Palacio de Sober (Lugo), del que destaca no solo el edificio que lo alberga sino las posibilidades de ocio que presenta toda la comarca, especialmente por su carácter vitivinícola. Señala que cada estancia en este hotel es “diferente” porque “todas las habitaciones son únicas”.
Por otro lado, este portal recomienda el Parador de Santiago, del que comenta que es uno de los hoteles más antiguos del mundo. Alaba las características del edificio y sus jardines, así como sus habitaciones, algunas de ellas de significativo valor histórico.