Gastronomía gallega con Mahou en el Festival de la Luz

Mahou fue, por cuarto año consecutivo, uno de los principales patrocinadores del Festival de la Luz y en esta edición la colaboración se vio reforzada con iniciativas gastronómicas que sirvieron para ampliar la oferta de ocio del evento. 

El Gastroespacio Mahou, ubicado en el espacio Cultivando Música, acogió varias exhibiciones gastronómicas a cargo de destacados Cocineros Mahou gallegos. Los chefs prepararon y explicarán ante el público distintas elaboraciones que tuvieron como base el producto autóctono y de temporada que se podía encontrar en el mercado del Festival de la Luz, ofreciendo además la oportunidad de degustar las tapas propuestas por los cocineros al final de cada uno de los showcookings.

El sábado, Gerson Iglesias, chef del restaurante vigués Ruxe Ruxe, sorprendió a los asistentes con su particular reinterpretación del kinilaw, un plato tradicional de las Islas Filipinas cuyo elemento esencial es el pescado y que él preparó en esta ocasión con bonito de Burela y maracuyá. El postre lo puso en el siguiente showcooking Álvaro Victoriano, del restaurante Peculiar de A Coruña, que obtuvo, con su “filipino” de mojito, el aplauso unánime del público concentrado en el Gastroespacio Mahou del Festival de la Luz.

La jornada del domingo contó también con la participación de algunos de los nombres más destacados de la gastronomía gallega actual. Kike Piñeiro y Eloy Cancela, del restaurante compostelano A Horta do Obradoiro, fueron los encargados de abrir la programación gastronómica con una tapa de “figo recheo de robaliza”, una propuesta arriesgada que tuvo muy buena acogida entre los asistentes. Después llegaría el turno del chef Alberto González, del restaurante Silabario de Tui, que llevó al Festival de la Luz una versión actualizada del clásico bocadillo de bonito, elaborado este caso con aguacate y pan sardo, entre otros ingredientes.

Los encargados de poner el broche de oro a la programación del Gastroespacio Mahou fueron Rafa Centeno e Inés Abril, del restaurante vigués con Estrella Michelin Maruja Limón. Explicaron paso a paso la elaboración de sus huevos fritos “de otra manera”, que sirvieron acompañados de panceta, shitake de carballo y una bechamel de trufa blanca.

El Gastroespacio Mahou acogió además varios talleres de tiraje en los que público tuvo la oportunidad de descubrir algunos trucos para conseguir la caña perfecta, como la importancia de mojar el vaso al comenzar, girar 45° la copa para que la cerveza resbale por la pared, dejar una crema de 2 cm, y otras claves que demuestran la importancia del tiraje para saborear una buena cerveza. Además, los visitantes pudieron ver y conocer de primera mano los principales ingredientes de la cerveza que están perfectamente integrados en el Espacio Mahou. 



La colaboración de Mahou con el Festival de la Luz se enmarca en su apuesta por el ocio y entretenimiento innovador.