Clesa continúa apostando por su gama de postres lácteos familiares. Para los más pequeños de la casa, lanza el nuevo Mini Bombón Kids y las nuevas Jelly Milk como parte de su estrategia de escalar puestos en este segmento de mercado al alza. Pensando ya en toda la familia, llena las neveras de España de crema bombón de chocolate blanco y natillas.
Jelly Milk es el primer postre infantil que combina el atractivo de las gelatinas con los valores nutritivos de la leche. La gama está compuesta por dos sabores, fresa y limón. No contiene colesterol, ni grasas y está elaborado con un 50% menos de azúcar añadido y con un 20% de leche gallega. Supone la apuesta de Clesa por introducirse en este mercado de gran tamaño y con sólidos crecimientos en la actualidad, en torno a un 4%, y subiendo.
La Crema Bombón de Clesa cuenta ya con un buen posicionamiento en el mercado nacional y cada vez es más demandando en todos los hogares. Clesa ha querido dar un paso adelante incorporando como novedad el Mini Bombón Kids, sin lactosa, que contiene un 50% menos de azúcar y que posee una textura cremosa y un sabor suave.
También lanza al mercado también las Natillas con el inigualable sabor de su clásico Bombón y la Crema Bombón Blanco, que mantiene la textura característica de la Crema Bombón, pero con la gran apetitosidad del chocolate blanco y el dulzor justo. Todas las novedades que presenta, al igual que todos los productos que elabora Clesa en su fábrica de Caldas de Reis, en Pontevedra, utilizan leche gallega 100% e incorporan el sello de origen y calidad diferenciada.